Un motor V12 diésel detroit colombia no algo que se encuentre debajo del capot de un vehículo. En camiones de la vieja época era algo normal, sobre todo en aquellos de larga distancia o bien en los off road para aplicaciones de carga extrapesada como un dumper de minería.
También existen algunos modelos de calle dotados de un block de estas características, como el SUV Q7 de Audi o los Rolls-Royce Cullinan y Bentley Bentayga. De existir, existen, pero ninguno como el que ocupa esta nota: un motor V12 diésel desarrollado por Detroit Diesel perteneciente a la Serie 71. ¿Qué tiene de especial respecto al resto? Te lo contamos.
Un motor V12 diésel muy particular
La gran diferencia de este motor V12 diésel respecto de uno convencional no solo se encuentra en la cantidad de cilindros en arquitectura en “V” ni mucho menos por el tamaño por su abultada cilindrada, unos 14 litros. Tampoco se hace eco de su potencial, que alcanza los 457 caballos.
El motivo de que este motor V12 diésel sea único se debe a que es un dos tiempos, y no cuatro como en la lógica. Esto significa que en lugar de mantener la admisión-compresión-explosión-escape solo tiene el primero y el último, emulando a los motores de motos de competición tipo enduro.
Este tipo de block diésel de dos tiempos suele ser una solución utilizada, y también eficiente, para obtener elevadas potencias girando a un régimen muy bajo, en motores que, por la naturaleza del vehículo, pueden ser de grandes dimensiones. En este caso, el Detroit Diesel Serie 71 alcanza su tope de potencia a solo 2.000 rpm.
En esta oportunidad, el motor fue provisto para empujar dicho dumper con su caja volcadora que, durante décadas, fue empleado en trabajos de minería en Australia, tras las cuales, y cuando ya dejó de cumplir su función, quedó totalmente abandonado.
Entre sus características dispone de un sistema de compresión volumétrica que no se emplea como un dispositivo de sobrealimentación al uso (turbo), sino como un requisito para cargar los cilindros con aire y realizar la combustión.
